domingo, 25 de julio de 2010

25 Iulii, DIES SANCTI IACOBI- HERRU SANCTIAGU-SEÑOR SANTIAGO, BUEN SANTIAGO- Ultreia, Primus Hymnus Peregrinorum



En este “Día del Patrón”, como se dice en mi tierra leonesa, es decir, del patrón de España, el Apóstol Santiago, cuyo sepulcro se guarda y venera en la catedral de Santiago de Compostela, en Galicia, queremos hacer nuestra contribución a dicha efeméride y a la circunstancia de que, por ser domingo el día del Santo, celebremos también el Año Santo Compostelano (habitualmente conocido como Xacobeo o Jacobeo), presentando aquí el texto latino del himno de peregrinos más antiguo de toda la historia de la peregrinación compostelana: el Canto de Ultreya, llamado también Canción de los peregrinos flamencos, debido al origen germánico de su estribillo.

Dum paterfamilias
Rex universorum
Donaret provincias
Ius apostolorum,
Iacobus Yspanias
Lux illustrat morum.

Primus ex Apostolis
Martir Ierosolimis,
Iacobus egregio
Sacer est martirio.

Iacobi Gallecia
Opem rogat piam
Glebe cuius gloria
Dat insignem viam,
ut precum frequentia
cantet melodiam.

Herru Sanctiagu,
Got Sanctiagu,
E ultreia, e suseia!
Deus, adia nos!

Iacobo dat parium
omnis mundus gratis,
ob cuium remedium
miles pietatis
cunctorum presidium
est ad vota satis.

Primus ex Apostolis
Martir Ierosolimis,
Iacobus egregio
Sacer est martirio.

Iacobun miraculis
que fiunt per illum,
arctis in periculis
acclamat ad illum,
quisquis solvi vinculis
sperat propter illum.

Primus ex Apostolis
Martir Ierosolimis,
Iacobus egregio
Sacer est martirio.

O beate lacobe,
Virtus nostra vere,
nobis hostes remove,
tuos ac tuere,
ac devotos adhibe
nos tibi placere.

Primus ex Apostolis
Martir Ierosolimis,
Iacobus egregio
Sacer est martirio.

Iacobo propicio
Veniam speremus,
et quas ex obsequio
merito debemus,
patri tam eximio
dignas laudes demus. Amen.

Primus ex Apostolis
Martir Ierosolimis,
Iacobus egregio
Sacer est martirio.



Un complemento del aspecto cultural de las peregrinaciones son las canciones o himnos de peregrinos, de variado contenido y carácter. La más antigua es esta Ultreya que encontramos en el Liber Sancti Iacobi y que cantaban los peregrinos mientras pedían limosna en su largo y duro caminar hacia Galicia.

Ultreia era el grito que identificaba a los peregrinos de Compostela en la Edad Media. Su origen, según algunos autores, procede del latín ultra “allá” y, según otros, que se basan en las informaciones aportadas por el libro I del Codex Calixtinus, de algún término griego o hebreo. 
Dos poemas latinos del Codex señalan esta aportación de palabras extranjeras: el primero es el capitulo XXVI fol 120 vº de la misa de Santiago, en el verso suseia, ultreia traducido al latín en el manuscrito sursum perge, vade ante (“levántate, avanza”); y el segundo en los suplementos fol. 193-122 en la cuarta estrofa de un poema titulado Alleluia in greco, escrito en una lengua de rama germánica: Herru Sanctiagu, gott sanctiagu, e Ultreia e suseia, deus aia nos (“Señor Santiago, buen Santiago, vayamos más lejos, más alto, dios ayúdanos”). El verso nació en canciones germánicas populares incluidas desde el siglo XI en textos eclesiásticos ampliamente difundidos por Europa total o parcialmente hasta llegar a Santiago de Compostela. Y así, el canto versificado de los Versi de Aimeri Picaud, sacerdote de Parthenay que resume la vida de Santiago, nombra los veintidós milagros atribuidos al Apóstol concluyendo con estas palabras: “no dejemos de cantar, Ultreia esuseia”.

La palabra aislada Ultreya fue retomada como grito de adhesión o de alegría por los peregrinos de Compostelanos, aparte de otros usos que, por ejemplo encontramos en numerosos textos medievales franceses y en el Roman de Renart. El estribillo “E ultreia e suseia, deus a(d)i(uv)a nos!” era parecido al que los cruzados en Tierra Santa cantaban para animarse a combatir a favor de la cristiandad, debido a lo cual, pudo ser también un grito de guerra asociado a las cruzadas a Tierra Santa, tal como, por otra parte, aparece empleado, a la francesa, en un poema de Guiot de Dijon del XIII donde una joven canta a su amado caballero partido a Tierra Santa “Mon Dieu, quand ils crieront Oultrée. Ô Seigneur, aidez mon pelèrin pour lequel je suis epouvantée, car impitoyables sont les Sarrasins”.
 Mala scripsit.
Dedicado a Ayo, soror mea, musica et quando peregrina?

2 comentarios:

  1. Qué artículo tan genial ! Gracias por enseñarnos algo distinto y tan interesante sobre este día.

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